20 Verdades y mentiras del masaje

Verdades y mentiras del masaje

Por fin alguien se anima a abordar las verdades y mentiras del masaje.

Es importante aclarar que los masajes no son soluciones mágicas para todos los males, aunque en ocasiones puedan parecerlo.

Como masajista, es crucial establecer límites y ser transparente sobre lo que un masaje puede y no puede lograr.

A continuación, te presento 20 verdades y mentiras del masaje para que puedas distinguir entre la realidad y las expectativas exageradas.

20 Verdades y mentiras del masaje

Dividiré los mitos sobre las verdades y mentiras del masaje en varios puntos para facilitar su comprensión y lectura.

Te sugiero que leas el título primero y luego reflexiones sobre si es verdad o no, ya que seguramente algunas de las verdades y mentiras del masaje en este post te sorprenderán.

Los masajes reductores son super eficaces

¿Verdadero o falso?

Los masajes reductores se promocionan como una solución para reducir la acumulación de grasa en áreas como glúteos, abdomen, caderas o piernas.

Aunque son ofrecidos en muchos centros de estética, su eficacia no siempre está garantizada.

Un masaje reductor por sí solo no puede contrarrestar hábitos poco saludables. Si no se complementa con una dieta adecuada, ejercicio físico y un estilo de vida saludable, los resultados pueden ser mínimos.

El masaje reductor puede contribuir a la reducción de grasa como parte de un enfoque integral de salud y bienestar, pero no es una solución independiente para perder peso.

Por lo tanto, es falso que un masaje reductor produzca resultados significativos sin otros hábitos saludables.

El masaje es una cuestión de lujo

¿Verdadero o falso?

Es falso que recibir un masaje sea exclusivamente un lujo o un capricho.

Aunque algunas personas pueden percibirlo de esa manera, la realidad es que los masajes no son solo para aquellos que pueden permitirse lujos.

En la actualidad, en muchas ciudades, los masajes son accesibles para una amplia gama de personas y se han vuelto más asequibles.

Se consideran una inversión en la salud y el bienestar, más que un lujo innecesario.

Por lo tanto, es falso que los masajes sean exclusivamente una cuestión de lujo. Son una forma válida de mejorar la calidad de vida y pueden incorporarse como parte de una rutina de hábitos saludables.

¿Los masajes quitan las varices?

Es falso que los masajistas puedan eliminar las varices. Las varices son un trastorno de la circulación sanguínea y no pueden ser eliminadas mediante masajes.

Aunque algunas personas crean que los masajistas tienen la capacidad de desaparecer las varices, esto no es cierto.

Muchos masajistas se abstienen de dar masajes a personas con varices, ya que no se consideran capacitados para tratar este problema.

Si bien los masajes pueden ayudar a aliviar ciertos síntomas asociados con las varices, como la sensación de pesadez o el malestar, no pueden eliminarlas por completo.

Un profesional del masaje debe aplicar técnicas específicas, pero no puede eliminar las varices en sí.

Por lo tanto, la afirmación es falsa.

Los masajes aumentan nuestro nivel de endorfinas

Es falso que los masajes aumenten las endorfinas, ya que lo que realmente se incrementa son las oxitocinas, conocidas como las hormonas antiestrés.

Las endorfinas son sustancias químicas producidas por el organismo que estimulan las zonas del cerebro relacionadas con las emociones placenteras.

Sin embargo, durante un masaje, lo que se potencia son las oxitocinas, que inducen una sensación de paz y relajación, contribuyendo así a una sensación de felicidad y bienestar.

Por lo tanto, la afirmación de que los masajes aumentan las endorfinas es falsa.

Es bueno recibir un masaje fuerte e intenso tras una carrera

No es recomendable recibir un masaje fuerte e intenso justo después de una carrera.

Es necesario esperar al menos 20 minutos después de la carrera para recibir un masaje, y este debe ser más bien relajante para ayudar a la recuperación muscular después del esfuerzo físico.

Es común recibir un masaje de descarga al día siguiente de la competición, como te mencioné en los 3 tipos de masaje deportivo. 

Los masajes disminuyen el cortisol

Si bien es cierto que los masajes pueden ayudar a reducir los niveles de estrés y proporcionar una sensación de relajación, no está científicamente probado que disminuyan los niveles de cortisol en sangre.

El cortisol es una hormona asociada al estrés que puede aumentar en situaciones de tensión.

Aunque los masajes pueden ayudar a reducir el estrés, no necesariamente implican una disminución directa de los niveles de cortisol en la sangre.

Los masajes son siempre seguros

Aunque los masajes son generalmente seguros y beneficiosos para la mayoría de las personas, existen contraindicaciones en ciertas condiciones médicas o situaciones específicas.

Es importante consultarlo con un profesional del masaje para determinar si es seguro recibir un masaje, especialmente si se tienen problemas de salud preexistentes.

No todas las personas pueden recibir masajes sin riesgos, por lo que es fundamental evaluar cada caso individualmente.

Si tengo cáncer no puedo recibir un masaje

Es importante señalar que muchas personas que luchan contra el cáncer tienen preguntas sobre la seguridad de recibir masajes durante su tratamiento.

La respuesta es que, sí, pueden recibir masajes, pero siempre bajo la recomendación de su médico.

Existe una creencia errónea de que los masajes podrían acelerar la propagación de las células cancerosas, pero no hay evidencia que respalde esta idea.

De hecho, los masajes pueden proporcionar alivio del estrés y mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer.

Es fundamental seguir las recomendaciones médicas y evitar los masajes si el médico considera que no son seguros en un caso particular.

Los masajes no deben reemplazar el tratamiento convencional, pero pueden ser complementarios para ayudar a mejorar el bienestar del paciente.

Los masajes ayudan a dormir mejor

Cuando experimentas un masaje, uno de los efectos inmediatos es la sensación de relajación, siempre y cuando el masajista sea profesional y sepa aplicar las técnicas adecuadas para inducir esa relajación.

Es esencial tener cuidado con los masajistas que aplican demasiada presión o que no ajustan la intensidad del masaje a las necesidades individuales del cliente, ya que esto puede resultar incómodo e incluso doloroso, como mencioné anteriormente en mi experiencia en la búsqueda de un masajista a domicilio.

Personalmente, creo que un buen masaje, cualquiera que sea su tipo, debe contribuir a la relajación del receptor.

Además, es cierto que los masajes pueden mejorar la calidad del sueño de manera significativa.

Los masajes curan la depresión

A menudo, veo a colegas masajistas que promocionan sus servicios como soluciones milagrosas, por ejemplo: «Regálate un masaje y despídete de la depresión».

Sin embargo, es importante no dejarse engañar. Un masaje no cura la depresión, y esperar que lo haga sería exigir demasiado a tu masajista.

Lo que es verdad es que un masaje puede ayudarte a sentirte mejor.

Los estados emocionales pueden afectar tu cuerpo, y el masaje puede contribuir a relajarlo y cuidarlo. Sin embargo, no puede sustituir el tratamiento adecuado para la depresión.

Los masajes previenen la alopecia

Si los masajes pudieran prevenir la alopecia, seguro que serían muy populares.

Es cierto que un masaje en el cuero cabelludo puede mejorar la circulación sanguínea, facilitando así la oxigenación y nutrición de los folículos capilares.

Sin embargo, es importante aclarar que un masaje en la cabeza no previene la alopecia ni promueve el crecimiento del cabello.

Los masajes sirven para cualquier dolor

Muchas personas recurren al masajista buscando alivio para sus dolores, pero a veces descubren que el dolor persiste o incluso se intensifica después del masaje.

Si bien los masajes pueden ser efectivos para aliviar dolores musculares o articulares relacionados con el sistema locomotor, no siempre son la solución definitiva.

El alivio del dolor puede depender de diversos factores, incluyendo aspectos patológicos, psicológicos o genéticos, por lo que es importante considerar todas las posibilidades.

Si experimentas un dolor persistente, es fundamental que consultes a un médico para obtener un diagnóstico preciso y un tratamiento adecuado.

Los masajistas no están autorizados para diagnosticar ni tratar enfermedades, por lo que cualquier afirmación en este sentido debe ser recibida con precaución.

Los niños no pueden recibir un masaje

Otra verdad que suele generar interrogantes es si los niños pueden recibir masajes.

Para muchos padres, la idea de llevar a sus hijos a un masajista puede generar dudas y preguntas sobre la seguridad y los beneficios de esta práctica.

Si bien es cierto que los niños generalmente no necesitan masajes terapéuticos para aliviar dolores, los masajes pueden ser muy beneficiosos para ellos.

Los masajes pueden ayudar a los niños a relajarse, aliviar el estrés y mejorar su bienestar general. Además, el contacto físico puede fortalecer el vínculo entre padres e hijos.

Es importante tener en cuenta que, al igual que los adultos, los niños pueden experimentar lesiones, tensiones musculares y ciertas condiciones médicas que podrían beneficiarse de los masajes.

En tales casos, es fundamental consultar con un profesional de la salud para determinar si los masajes son apropiados y seguros para el niño.

En muchos lugares, se ofrecen programas de formación para que los padres aprendan a dar masajes a sus hijos, lo que puede ser una excelente manera de promover el bienestar físico y emocional en el hogar.

Si tengo una infección puedo recibir un masaje

Ha habido ocasiones en las que he visitado a clientes y, al preguntarles cómo se encontraban, me han informado que estaban tomando antibióticos para tratar una infección activa.

Aunque los masajes pueden ser beneficiosos en muchas situaciones, no es aconsejable recibir un masaje si estás tomando antibióticos debido a una infección activa.

Una de las razones es que el masaje podría aumentar la circulación sanguínea y la temperatura corporal, lo que podría exacerbar la infección.

En general, si estás tomando medicamentos para tratar una condición médica, ya sea una infección bacteriana o viral, no se recomienda recibir un masaje hasta que la condición haya remitido por completo.

Los masajes son siempre relajantes

Otra pregunta común sobre las verdades y mentiras del masaje es si todos los masajes son inherentemente relajantes.

En mi experiencia, los masajes deberían ser diseñados para ser relajantes, aunque en ocasiones pueden resultar más dolorosos que relajantes.

Para que un masaje sea verdaderamente relajante, el masajista debe aplicar técnicas específicas de masaje diseñadas para inducir la relajación, las cuales pueden variar según el tipo de masaje.

Algunas personas buscan un masaje más intenso o vigoroso, casi como una «paliza» al cuerpo, y esto puede resultar en una experiencia menos relajante.

Personalmente, incluso cuando se solicita un masaje más intenso, siempre incorporo técnicas de masaje relajante para asegurar que el tratamiento tenga un efecto calmante.

Por lo tanto, no todos los masajes son siempre relajantes.

Si estoy embarazada no puedo recibir un masaje

Son muchas las futuras mamás que se hacen esta pregunta, especialmente cuando llevan seis meses de embarazo y comienzan a experimentar dolores de espalda debido al crecimiento del bebé.

Una mujer embarazada puede recibir un masaje siempre y cuando lo prescriba su médico que lleva el embarazo.

El masaje para embarazadas está contraindicado en el primer trimestre del embarazo, ya que durante este período la gestación podría estar en riesgo.

Es por eso que un masajista no dará un masaje a embarazadas hasta el cuarto mes.

Además, muchos quiromasajistas, yo incluido, no realizamos masajes a embarazadas ni siquiera bajo prescripción médica.

No porque no sea recomendable, que lo es para aliviar la tensión muscular de la espalda, sino porque preferimos que el futuro bebé esté en manos de profesionales sanitarios.

El post masaje siempre es placentero

Mucha gente asume que recibir un masaje siempre resulta placentero y que tras la sesión de masaje se sentirán completamente relajados y en la cima de la felicidad.

Sin embargo, aunque en un 90% de los casos recibir un masaje puede proporcionar una experiencia sumamente agradable, no siempre es así.

Dependiendo del tipo de masaje que se haya recibido, es posible experimentar dolores, molestias o incluso agujetas después de la sesión.

Generalmente, estas molestias post-masaje no deberían durar más de 48 horas y tienden a disminuir con el paso del tiempo.

Por lo tanto, recibir un masaje no siempre resulta en una experiencia placentera inmediata después de la sesión.

Un quiromasajista puede tratar y diagnosticar

Hay muchos quiromasajistas que, tras completar un curso de masaje y obtener su título, pueden caer en la creencia errónea de que poseen conocimientos médicos.

Es importante tener precaución con este tipo de profesionales, ya que aunque el quiromasaje es una técnica manual efectiva que puede mejorar el bienestar de las personas, un quiromasajista nunca debe asumir el papel de médico.

Aunque los quiromasajistas tienen conocimientos de anatomía, lesiones, tejidos y enfermedades para determinar cuándo es apropiado aplicar un masaje, no están capacitados para diagnosticar o tratar lesiones.

Si encuentras un quiromasajista que intenta diagnosticar lesiones o curar patologías, es posible que esté ejerciendo más allá de sus competencias y pueda representar un riesgo para tu salud.

En España, los únicos profesionales autorizados para diagnosticar y tratar patologías son los profesionales sanitarios, y el quiromasajista no entra en esta categoría.

Sin embargo, en otros países, las regulaciones pueden variar y es posible que los quiromasajistas tengan un alcance de práctica diferente. Es importante tener en cuenta estas diferencias según el lugar donde vivas.

El quiromasaje es un grado que se estudia en la universidad

Una vez, durante una visita a domicilio, un cliente expresó su deseo de estudiar quiromasaje, pero le desanimaba la idea de cursar una carrera universitaria de cuatro años.

Mi sorpresa fue evidente al escuchar que el cliente pensaba que yo tenía una carrera en quiromasaje.

El quiromasaje es, en realidad, una técnica manual que brinda numerosos beneficios para mejorar la calidad de vida, pero no requiere una formación universitaria de cuatro años.

Existen diversos programas de formación no reglada que capacitan a quiromasajistas, pero el quiromasaje no es un grado universitario ni se estudia en la universidad. 

Espero que te haya gustado este post sobre las verdades y mentiras del masaje. 

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